Los problemas del USWNT, explicados

Apr 23, 2024

AUCKLAND, Nueva Zelanda — El descenso de la selección estadounidense desde la cima del fútbol femenino alarmó al público estadounidense el martes. Conmocionó a los jugadores aquí en el Mundial de 2023, durante y después de un empate 0-0 con Portugal que los llevó al borde de la ignominia.

Pero esto no empezó en Australia. No ha sido sorprendente ni repentino.

La preocupación se acumuló bajo la superficie del USWNT durante los últimos 24 meses, y especialmente los últimos 10. Los temores se han hecho realidad aquí en Nueva Zelanda, pero han existido durante mucho tiempo dentro y fuera de US Soccer. La tormenta que casi azota la costa esta semana se ha estado formando durante años y sus elementos son abundantes. Lo que sigue es un intento de explicarlos.

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Los problemas del USWNT son numerosos. Son tácticos y técnicos, sistémicos y fortuitos. Pero los problemas del equipo de 2023 se deben en gran medida a tres factores de alto nivel:

1. Una cantera juvenil defectuosa no está produciendo el tipo o la calidad de jugador adecuados. Varios de los mejores jugadores que produjo están lesionados.3. Su entrenador, Vlatko Andonovski, no está sacando lo mejor de los sanos.

No, es sólo que las jugadoras de todo el mundo están mejorando mucho y docenas de equipos nacionales femeninos están mejorando a un ritmo mucho más rápido que el USWNT.

Las potencias futbolísticas tradicionales del planeta (como, por ejemplo, Países Bajos y Portugal) están aprovechando la infraestructura que construyó y sostuvo el éxito del fútbol masculino. Ahora están invirtiendo en sus programas para mujeres.

Mientras tanto, en Estados Unidos, un esfuerzo por replicar algunos aspectos de esos productivos oleoductos europeos desató una guerra territorial en el fútbol juvenil y finalmente fracasó. (Exploré ese esfuerzo y las fallas del oleoducto estadounidense en un artículo reciente. Dan Wetzel también explicó el impacto en su columna del martes).

El USWNT todavía tiene algunos jugadores maravillosamente talentosos. Pero probablemente todos pasamos por alto algunas cosas:

1. Todos menos uno de los 23 estadounidenses en esta Copa del Mundo juegan en la NWSL, la liga profesional estadounidense, que ya no cuenta con los mejores talentos no estadounidenses del deporte. Probablemente sobrevaloramos a estrellas nacionales como Sophia Smith y Trinity Rodman, sin mencionar a Emily Fox y Andi Sullivan, o al menos sobrestimamos su preparación para el escenario global. (La mayoría de las estrellas europeas, por otro lado, se ponen a prueba regularmente en la Liga de Campeones Femenina de la UEFA, en el pináculo del juego de clubes. La única estrella del USWNT que juega actualmente en ella es Lindsey Horan.)2. Los estadounidenses tienen talento pero no están desarrollados adecuadamente. Muchos son unidimensionales o incompletos. Pueden correr, driblar, disparar y ganar duelos aéreos. Pero les cuesta pasar y moverse, o leer el juego. En los días más primitivos del deporte, su atletismo ocultaba sus defectos; Supusimos incorrectamente que eso volvería a suceder.3. No ha sucedido porque aparentemente Andonovski quiere que sus jugadores jueguen fútbol moderno, técnico y posicional, un juego para el cual no están bien equipados y un esquema del que claramente dudan.

"No todos los jugadores, en cada línea, están preparados para tener éxito", dijo esta semana el exdelantero del USWNT Christen Press.

Tanto Press como su exdelantero estadounidense Tobin Heath dijeron que han sentido eso desde los Juegos Olímpicos de 2021. "Tú [Press] fuiste uno de los mejores jugadores de los Juegos Olímpicos", dijo Heath. "Sam Mewis era uno de los mejores jugadores del mundo antes de los Juegos Olímpicos. ¿Cómo [un jugador así] puede convertirse en nada? Y eso es lo que estoy viendo [en la Copa del Mundo]".

El USWNT no puede controlar los juegos porque no puede retener el balón. No pueden quedarse con el balón por diversas razones. Cuando lo intentan, piensan en un paso a la vez, en lugar de ver el panorama más amplio del juego y crear ataques con un plan coherente de varios pasos. Juegan como individuos, como 11 en lugar de uno.

Su movimiento sin balón contra Portugal fue particularmente terrible. Secuencias como esta ocurrían con regularidad:

Los terribles movimientos sin balón tienen consecuencias en cascada. Sin él, nadie con el balón cree que podrá encontrar un compañero de equipo abierto. Entonces, en lugar de conservarlo y esperar a sus compañeros de equipo, lo abandonan en pánico. Y una vez que empieza a ser rechazado, no tiene sentido moverse sin balón. Entonces todo el equipo se estanca. La confianza (en los demás y en uno mismo) disminuye. Y el estancamiento se vuelve cíclico.

"Necesitamos un poco más de confianza cuando jugamos", dijo Horan el martes. "Necesitamos estar más tranquilos, más preparados".

Por otra parte, es difícil estar preparado cuando no hay nadie a quien pasarle el pase. Por eso los jugadores parecen estar asustados.

Es cierto que tampoco están "sincronizados" a la defensiva. Las mismas dudas y falta de confianza se aplican a la presión, lo que expliqué en detalle después del partido contra Holanda.

Son ambos.

El aparente intento de Andonovski de implementar un sistema moderno valió la pena, pero fue defectuoso. Durante el año pasado se volvió cada vez más obvio, al menos para los observadores externos, que su sistema no estaba funcionando y no se adapta a sus jugadores actuales, hasta el punto de que, tres partidos después de una Copa Mundial, no está realmente claro cuál es el plan. es, o si existe.

Los extremos reciben el balón en la línea de banda; los centrales dan un paso con él hacia el mediocampo; y una y otra vez, no está del todo claro a quién se supone que deben pasar o qué se supone que deben hacer.

Y, sin embargo, Andonovski nunca se ha molestado en encontrar un plan alternativo. "Tenemos que ceñirnos a nuestros principios, tenemos que ceñirnos a nuestro modelo de juego y tenemos que ceñirnos a nuestra filosofía", dijo el martes. A lo que los fans respondieron: ¿Qué principios? ¿Qué modelo de juego? ¿Qué filosofía?

Deberían jugar directos y en transición, presionando como locas y maximizando su atletismo, que sigue siendo el mejor de su clase.

Los balones largos a menudo son objeto de burla, y con razón cuando son el último recurso, que es a menudo lo que parecen ser para el USWNT. Son los que entran en pánico, que son una de las razones por las que Estados Unidos ocupa el puesto 21 en esta Copa del Mundo en pases por secuencia, una medida de posesión sostenida que normalmente eleva a los buenos equipos.

Los pases largos, sin embargo, pueden ser efectivos cuando están coordinados. Los delanteros pueden estirar la línea defensiva del oponente; los centrocampistas pueden posicionarse para ganar segundos balones; Y boom, los partidos se pueden dominar sin posesión. Estados Unidos debería intentarlo algún día.

No precisamente. Tomó varias decisiones cuestionables hace mucho tiempo: que Crystal Dunn, una mediocampista superestrella, iba a jugar de lateral izquierdo; que Smith, el delantero más prolífico de la NWSL, iba a jugar de banda; que el equipo iba a jugar con cierto estilo, y él nunca ha dudado en hacerlo.

"En cada partido de fútbol hay que hacer ajustes tácticos para explotar los espacios, conseguir ventajas numéricas, bla bla", dijo Press. "Y no hemos visto, en un partido [de la Copa Mundial], ninguno de esos ajustes tácticos. Pero apunta a un punto más importante: ¿Hemos visto algún ajuste táctico en el último año? ¿Hemos visto probar formaciones diferentes? ¿Hemos visto algún ajuste en la forma en que estamos presionando? Hemos visto al equipo salir durante el año pasado en la misma forma general, en la misma estructura general de presión".

Encogimiento de hombros.

Quizás se dejó engañar por la brillantez de Mallory Swanson. Swanson casi sin ayuda de nadie robó algunas victorias para Estados Unidos a principios de este año a pesar de las actuaciones preocupantes del equipo. Luego se desgarró el tendón rotuliano en abril.

Ciertamente han dolido y serían una excusa viable para no ganar una tercera Copa Mundial consecutiva, pero no para parecer tan impotentes.

Además de Swanson, Catarina Macario, quien probablemente habría sido titular como delantera, ha estado fuera durante más de un año recuperándose de un desgarro del ligamento anterior cruzado. El centrocampista Sam Mewis está de baja desde 2021. Y Becky Sauerbrunn, la veterana líder defensiva del equipo, agravó una lesión en el pie a principios de junio, lo que la obligó a perderse el torneo.

En ausencia de Sauerbrunn, Andonovski movió a Julie Ertz del mediocampo defensivo al central; Y ante la consiguiente ausencia de Ertz en el mediocampo, Andi Sullivan ha sido un lastre.

No hasta este punto. Muchos dentro del fútbol femenino han esperado que el dominio estadounidense eventualmente desaparezca, por las razones mencionadas al principio de este artículo. Pero Estados Unidos debería permanecer entre los contendientes. Es probable que tenga un nuevo entrenador en 2024 y más allá. Tendrá menos lesiones y más suerte.

Y recuerde: a pesar de toda la histeria de las últimas 36 horas, el USWNT aún podría avanzar hasta lo más profundo de la Copa del Mundo de 2023. Su defensa ha sido sólida. Sus cifras de goles esperados, una estadística complicada que mide la creación de oportunidades, han sido sólidas. Todavía no ha perdido este año calendario; podría seguir sobreviviendo y avanzando mientras jugaba un fútbol pútrido.